Se nos fue el Brujo, se apagó la magia. El 9 más 9, el dibujo del área, el rostro del gol. Sus cinco «pichichi» brillarán hoy y para siempre sobre el templo asturiano del Molinón.
A los futbolistas se les mide por su calidad en el césped, ahí el era un 9, el mejor en su época.
A las personas no hay mejor manera de medirlas que por su calidad humana y ahí todo el mundo está de acuerdo en que Quini era un 10 .
D.E.P.
Por Manel Díaz para muchacalidad.com #FútbolFerrol