El derbi que disputaron esta mañana Celta B y Deportivo en Balaídos terminó con victoria local por 2-1 pero de la peor manera posible, tangana entre futbolistas de ambos equipos e invasión de campo por parte de la afición celeste con intervención de los antidisturbios.
El encuentro terminó con mucha tensión. Un saque de esquina a favor del Dépor lo cabeceó Ian Mackay que había subido al remate, y lo atrapaba sobre la línea Gaizka Campos, justo cuando el colegiado señaló el final del partido cuando aun no se había cumplido el tiempo de descuento.
Tangana e intervención de la policia
Ahí comenzó el revuelo, ya que los deportivistas reclamaban más minutos y los celestes ya celebraban su victoria. Hubo tangana entre jugadores con Gabri Veiga y Ian Mackay como protagonistas destacados en el centro de la mayoría e invasión de campo de los aficionados celestes que se fueron a celebrar delante de la grada donde se encontraban los de los blanquiazules. Los antidisturbios tuvieron que intervenir para desalojar el campo, por segunda vez en la mañana , ya que antes del partido el parque de A Bouza fue escenario de enfrentamientos violentos entres grupos de ambas aficiones.
Triste imagen para un derbi en el que debería reinar la concordia entre dos aficiones que aunque rivales, son dos ejemplos de amor a sus colores.