El Coruxo acude a la cita con la UDS y a un estadio mítico del balompié español. El Helmántico sabe lo que es el buen fútbol y su afición entiende de buenos y malos momentos de los suyos en una época que añora los tiempos pasados y en la que sufren junto a los suyos, ahora en la lucha por por escapar de la penúltima posición que ocupan en la tabla.
Este domingo 17:00 h. en el Helmántico, será una gran prueba para calibrar el estado actual de los dos equipos. Para el Coruxo una victoria le aportaría unos réditos muy importantes a muy corto plazo y a todos los niveles. Y para el Salamanca CF UDS será un partido de doble filo ante la necesidad que tiene de hacerse con los tres puntos.
El Coruxo en la sexta plaza, Salamanca penúltimo clasificado, pero será un partido muy difícil ya que el Salamanca CF UDS es mejor equipo de lo que refleja la clasificación, un estadio de primera y una afición entendida en fútbol. La clasificación muchas veces no se ajusta a la realidad, y el Salamanca CF es un buen ejemplo de ello, tiene buenos jugadores. Le falta la tranquilidad que dan los resultados.
En el partido de la primera vuelta disputado entre ambos equipos, el empate sin goles no había dejado contento a nadie, la crónica de aquel día reflejaba «El Coruxo jugó uno de los mejores partidos en lo que llevamos de temporada, línea por línea tuvo más minutos de dominio y posesión que el Salamanca. Pero el gol no llegó y terminó por eclipsar el juego verdiblanco» …
El conjunto charro empezó la competición con buen pie pero poco a poco le fue costando ganar los partidos, se fue hospedando en su fortaleza defensiva y sin darse cuenta fue entrando en marcadores muy ajustados. Es el equipo menos goleador de los cinco grupos de la categoría con doce goles, y es el menos goleado de este grupo conjuntamente con el Leganés «B» con veinte goles. El Coruxo es el segundo equipo que menos goles encaja.
Toda reacción para un equipo necesitado empieza por sumar de tres en tres jugando como local, ahí llegó el cambio de entrenador en el Salamanca tras la derrota ante el Arenteiro en el Helmántico. María Hernández sustituía a Calderón y se hizo con las riendas, en cuatro partidos consiguió dos victorias, un empate y una derrota.
Que nadie se vaya a pensar que será fácil este domingo, en una temporada con permanentes sobresaltos y donde nadie tiene garantizada la victoria, todos los equipos lo saben todo o casi todo del rival de turno.
Los estándares de competición cambian rápidamente, cada vez se tienen más datos e información, el fútbol vive de la opinión y del criterio, lo mismo que las herramientas de trabajo fueron cambiando para bien, y los recursos humanos más preparados que se ajustan a la realidad del trabajo y la capacidad.
Ganar este domingo aportaría un plus de buenas expectativas al Coruxo, empatar sería una inyección de estabilidad. Realmente se trata de ganar o empatar, pero salir convencido de lo que se hizo en los noventa minutos, es que incluso muchas veces una derrota enseña más cosas que una victoria.
El conjunto salmantino encara estas diez jornadas con mucha exigencia lo mismo que el resto de equipos ya que treinta puntos en juego son muchos puntos para todos, y nadie tiene nada asegurado. Se repite otra vez, la clasificación del Salamanca no es real.