La ‘esedé’ salvó los muebles al final

Foto:SD Compostela

El Compostela cerró la primera vuelta del campeonato en el campo Miramar ante el Marino de Luanco.

Se tuvo que conformar con el empate tras ir abajo en el marcador durante muchos minutos del encuentro. Hoy se rompió la racha de imbatibilidad, el equipo volvió a recibir un gol pero al menos sigue sin conocer la derrota.

El Compostela saltó a Miramar recuperando efectivos con respecto a la pasada jornada, estaban ya en el equipo Pablo Antas, Fer Beltrán y Damián Canedo. Fabiano salió con defensa de cuatro, con Álvaro Casas y Pablo Crespo en el centro de la defensa, Riki Mangana y Damián Canedo en los laterales derecho e izquierdo respectivamente; Pablo Antas, Samu y Fer Beltrán en el centro del campo, Roque caído algo al lado derecho del ataque, quedando Mario Rodríguez con libertad para moverse en las distintas zonas del ataque y enlazando con Darío, que era el jugador más adelantado de los de Fabiano. Por su parte el Marino de Luanco salió con un 4-4-2.

El partido comenzó con los dos equipos bien posicionados sin pasar apenas nada en los primeros compases del encuentro, pero a partir del minuto diez de juego las cosas empezaron a cambiar, el Marino de Luanco adelantó las líneas y empezó a dominar por completo el partido, el Compostela estaba teniendo una presencia casi testimonial. El equipo local era el dueño del esférico y lo tocaba de un lado a otro del campo con una cierta comodidad, en esa tesitura los balones empezaron a llegar al área blanquiazul, muchos de esos balones eran rechazados por los centrales pero el Compostela no estaba nada cómodo sobre el césped, que estaba muy blando y a medida que fueron pasando los minutos se fue rompiendo más.

Sobre el minuto quince de juego llegó una ocasión muy clara para el equipo asturiano, un centro por el lado derecho del ataque que el delantero local, Isma Fagir remata pero Pato Guillem repele el balón, que queda muerto en el área y Pablo Crespo la despeja a córner; en ese momento la grada casi cantaba el gol, fue increíble parada del portero charrúa.

Minutos más tarde el equipo de Fabiano volvió a encajar un gol después de más de setecientos minutos sin hacerlo y sin verse con el marcador en contra. Un pase de Oscar, el interior derecho del equipo local, le hace un pase a las espaldas de la defensa quedándose Fagir sólo ante Pato y el balón se fue al fondo de la red, anotando el 1-0 en el marcador. En esta jugada algunos jugadores del Compostela reclamaban fuera de juego, pero no lo entendió así el colegiado.

El Marino de Luanco en esos minutos estaba haciendo muy buen partido y el Compostela casi que parecía el de las primeras jornadas, el equipo asturiano lo estaba superando en todos los aspectos del juego; otro de los problemas que tuvo el equipo de Fabiano fue adaptarse al mal estado del terreno de juego, algo habitual cuando juega en este tipo de campos.

A partir del minuto veinte de juego el partido empezó a nivelarse más, el Marino levantó un poco el pie y el Compostela empezó a llevar más el peso del encuentro, se puede decir que a partir de ese minuto empezó a demostrar porque va en la zona alta de la tabla. Así el equipo de Fabiano comenzaba a llegar cada vez con más frecuencia al área rival, pero se fallaba en el último pase; como un mal control de Samu en la frontal del área que evitó que le pudiera dar un balón en buenas condiciones a jugadores como Darío. En esos minutos el Marino estaba incómodo sobre el campo, muy replegado como si el partido fuera a acabar pronto.

Otra llegada peligrosa de los de Fabiano vino de un pase al espacio del lado derecho del ataque blanquiazul que controla Darío, este le hace el pase de la muerte a Mario Rodríguez, pero el balón es interceptado por uno de los centrales del Marino. Cuando se daba casi por finalizado el primer tiempo tuvo el Compostela la ocasión más clara en las botas de Darío, en un disparo a media altura desde el lado derecho del área, el balón lo rechaza el portero local, Buru, se va al larguero y termina en córner, que no tuvo mayores consecuencias.

Segundo acto

El Marino también creó peligro minutos más tarde pudiendo dejar el encuentro sentenciado. Así en ataque por el lado derecho del ataque local, Luis Nuño desde el lado derecho del área realiza un potente disparo que se va la cruceta de la portería defendida por Pato. El partido estaba abierto y daba la sensación que podía llegar la sentencia local o el empate visitante. Sobre el minuto setenta de partido, Riki Mangana roba un balón y hace una internada por la banda adentrándose en el área rival, centra rasa para Darío pero su disparo lo atrapa Buro, parecía que no era el día del Compostela. Minutos después en Jorge Cano realiza un remate de cabeza que vuelve a atrapar Buro. Por su parte el Marino tuvo una llegada clara por parte de uno de sus atacantes, pero entre Pablo Crespo y Pato neutralizaron el ataque.

En esos minutos el equipo local se veía ya con los tres puntos y el equipo de Fabiano empezaba a ver que se iba de vacío de Miramar, pero entonces volvió a aparecer Darío; Riki Mangana realiza un potente saque de banda que llega hasta el delantero santiagués y está vez en dos intentos bate a Buru, poniendo la igualada en el electrónico de Miramar. A partir de ahí los dos equipos intentaron ganar el encuentro, siendo el Compostela el equipo que más se fue arriba, tal y como se desarrolló la segunda mitad el partido estaba para que lo ganara el equipo visitante, algo que le pudo costar un disgusto porque al contraataque lo pillaban con facilidad.

Al final reparto de puntos, que posiblemente fuera lo más justo por lo visto en la tarde hoy en Miramar, un campo maldito para el Compostela en donde no se recuerda una victoria blanquiazul. El próximo rival será el Oviedo Vetusta el próximo domingo día 22 a las 17:00 horas en el Vero Boquete.

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