⚠️ La plantilla rompe su silencio: “Ya no podemos más”
La crisis ha estallado en el Juventud Torremolinos. Lo que debía ser una temporada histórica en Primera RFEF se ha convertido en un auténtico calvario. Los futbolistas, acompañados por empleados del club y representantes del fútbol base, han decidido decir basta tras meses sin cobrar y promesas vacías por parte de la directiva.
💬 Comunicado desgarrador ante los medios
En una rueda de prensa cargada de tensión y emociones, los capitanes leyeron un comunicado que dejó helado al vestuario:
“Estamos viviendo una situación límite. Se nos adeudan varias mensualidades y primas pendientes. Muchos compañeros tienen serias dificultades para afrontar gastos básicos como alquileres o facturas. Hemos esperado demasiado y las palabras del club ya no bastan.”
Según explicaron, los retrasos afectan también a entrenadores, empleados y jugadores del fútbol base, con deudas que se arrastran desde verano. A pesar de que el equipo atraviesa un gran momento deportivo —cinco partidos sin perder y una goleada reciente al Ibiza (3-0)—, la realidad fuera del campo es insostenible.
💣 “Nos prometieron soluciones… y volvieron a mentirnos”
Los jugadores aseguran haber recibido hasta doce fechas distintas de pago incumplidas y múltiples versiones sobre una supuesta venta del club que nunca se concreta.
“Nos dicen que hay inversores interesados, pero no atienden ninguna oferta. La sensación es que quieren ganar tiempo mientras seguimos sin cobrar”, lamentó el capitán Sergio Díaz, visiblemente afectado.
El grupo japonés ACA Football Partner, antiguo propietario, habría abandonado el proyecto, dejando a la entidad malagueña en una deriva total.
💚 “Seguiremos defendiendo el escudo, pero exigimos dignidad”
Pese al caos, los futbolistas dejaron claro su compromiso con la afición:
“Nuestro respeto por el club y por el pueblo de Torremolinos sigue intacto. Pero exigimos condiciones dignas para trabajar.”
También agradecieron el apoyo constante de la AFE, que les está asesorando para afrontar legalmente la situación.
🚨 Un vestuario al borde del colapso
Mientras los dirigentes buscan inversores para mantener el control, el equipo se entrena entre la frustración y la incertidumbre. Las sonrisas del vestuario se han cambiado por miradas de preocupación. “Nos prometieron que el día 15 se regularizaría todo… y una vez más no cumplieron”, lamentan.
El futuro del Juventud Torremolinos pende de un hilo: la pelota sigue rodando, pero la paciencia se acaba.