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Compartiendo rondos con Griezman, Fernando Torres o Felipe Luis se le podía ver en el Cerro del Espino, o en el calentamiento de la previa en la Champions League, junto al «profe» Ortega. Si, han leído bien. Kevin Stiven Caicedo Sinisterra (Cali, 1996), criado en Ferrol desde los cuatro años, jugó en Sartaña, Racing Club Ferrol y Galicia de Caranza, de donde salió edad cadete hacia la cantera del Atlético. Allí después de pasar por los equipos cadete y juvenil, llegó a entrenarse durante la temporada 2014/15 con el Atletico de Madrid en la previa del partido que disputó ante el Malmö FF sueco. Esa misma temporada el ferrolano, gozaba de un papel destacado en el primer equipo juvenil de los colchoneros y se entrenaba con asiduidad bajo las órdenes del «Cholo» Simeone en el Cerro del Espino o el mismísimo Vicente Calderón.
Antes, sus actuaciones con la rojiblanca, ya habían traspasado el Atlántico. La selección colombiana sub 17 llamó a su puerta, el rápido extremo – delantero se convertía en internacional con su país. Los responsables del fútbol base colchonero, confiaban en la nueva joya colombiana. Tanto que su contrato fue ampliado por tres campañas durante su etapa juvenil.
Una inoportuna lesión en el peroneo de su pierna izquierda, trunco la temporada soñada del joven extremo colchonero y le obligaba a pasar por el quirófano en el tramo final de la temporada. En el mes de abril era operado en Madrid por el prestigioso doctor Abad Morenilla. Con el jugador todavía convaleciente, el Atlético B descendía a la tercera división y el club deshacía su equipo C, lo que propició que más de 50 jugadores optasen a tan solo 22 plazas para el filial atlético. El futbolista tras comenzar su recuperación, volvía a entrenarse con los atléticos con la temporada ya muy avanzada. Ante la incertidumbre creada y renqueante todavía de su lesión, Kevin decidía poner punto y final a su etapa en la capital, tras cinco temporadas, y regresar a casa para recuperarse totalmente de sus dolencias. Contó con alguna en la tercera madrileña, pero pudo más la morriña y la posibilidad de jugar cerca de casa en la misma categoría.
Pasaron más de ocho meses antes de que el futbolista pudiese volver a pisar el césped en un partido oficial. Concretamente no sería hasta enero de 2016 cuando el Galicia de Mugardos por entonces en la tercera división, le diese la oportunidad de volver a sentirse futbolista. Reconvertido en lateral , Kevin disputaba los últimos minutos del Barbadás – Galicia de Mugardos, en el que los mugardeses se imponían por 0-1. De ahí al final de temporada, acumuló 691 minutos, repartidos en 14 partidos, 6 de ellos como titular.
En la temporada 16/17, con el SDC Órdenes en la tercera gallega, conseguiría la continuidad deseada por cualquier jugador. Disputó 30 partidos, 22 como titular y anotó 2 goles. Kevin volvía a sentirse futbolista dos temporadas después. Sinembargo y tras firmar por el UD Somozas de Michel Alonso a la temporada siguiente, no terminó de cuajar y tan solo disputaría 7 partidos durante la temporada, uno como titular. Con todo, dijo sentirse muy a gusto en Somozas y así, Kevin disputaba con el filial blanquiverde, 14 partidos en los que anotó 18 tantos.
Para la presente campaña y a pesar de contar con ofertas de superior categoría, su destino será el CD Narón. O Cadaval acogerá a un futbolista de raza. Los amarillos movieron ficha y se hicieron con los servicios del jugador para su debut en la primera regional. Así las cosas, lejos queda ya aquel sueño del niño que hizo las maletas para soñar con convertirse algún día en futbolista profesional y que a día de hoy se enfrenta a otra experiencia vital bien diferente. Kevin ha buscado compartir su pasión por el fútbol con su vida profesional y familiar. Afincado en Narón y orientado hacia la estética en su trabajo actual, ha formado una familia y busca ya la comodidad y la confianza que le da estar cerca de su familia y amigos. Un sueño hecho realidad, esta vez sí, disfrutar con los suyos de la vida real.
Manel Díaz muchacalidad.com #FutbolFerrol