El Sporting Meicende de la segunda autonómica cayó eliminado en su feudo a pesar de vencer por 1-0 en el partido de vuelta de las semifinales de la Copa A Coruña. El Victoria (equipo de Preferente) se impuso en la tanda de penaltis, después de que los de Vilaboa consiguieran empatar la eliminatoria (2-1 en la ida a favor de los coruñeses), gracias a un gol del recién entrado Barral, y que le permitirían a los suyos llevar el partido a la prórroga.
Un periodo adicional marcado por el cansancio de ambos conjuntos y en el que los goles quedaron reservados para la tanda de penaltis, donde fueron necesarios 17 lanzamientos (alguno que otro con polémica, con un gol “fantasma” en el quinto lanzamiento, a favor del conjunto local, que el colegiado no decretó), hasta que el propio Barral vio como el meta blanquinegro, Jano, atajaba su disparo, acabando por tanto, con el sueño de la parroquia sportinguista de llegar a disputar el próximo viernes la ansiada final en el estadio de Riazor. Estadio ya conocido para “las cebras”, donde la temporada pasada disputaron su eliminatoria de Copa del Rey (cita histórica para el club), frente al Villarreal, en ese mismo césped. Los blanquinegros tendrán enfrente al Olímpico, verdugo del Montañeros.