El último baile de Diego Rivas para aguar la fiesta del Deportivo en Riazor (VIDEO)

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Riazor volvió a vestir este domingo sus mejores galas para recibir a un Arenteiro que llegó a la cita con su entrenador de porteros bajo palos. El naronés Diego Rivas se volvió a colocar los guantes después de la temporada de su retirada con el Racing de Ferrol, para convertirse en villano y aguar la fiesta del Dépor después de que los coruñeses mandaran en el marcador durante todo el partido.

El Arenteiro logró un empate (2-2) in extremis en Riazor cuando todo parecía indicar que el Deportivo se llevaría los tres puntos después de que los de Imanol Idiakez se adelantaran con los tantos de Mella en la primera parte y Villares en el 63. Sin embargo Luis Chacón, que fuera pretendido por los coruñeses durante el pasado mercado invernal, hizo el 2-1 pocos minutos después y el ex deportivista Romay logró la igualada en el tiempo de descuento, anotando un tanto en el que Diego Rivas colaboró incorporándose al ataque en un saque de esquina. El de Narón tuvo una gran actuación durante el choque y sus intervenciones resultaron decisivas en el resultado final.

Diego Rivas feliz por colocar el broche de oro a su carrera en Riazor ante el Deportivo

El destino es a veces caprichos y el guardameta de Ferrolterra, que llegó a militar en el Fabril, cuadraba así un círculo que lo ha llevado ser protagonista durante la semana anterior al partido y durante un choque que se ha convertido ya en su último baile. “Si no pasa nada extraño, el de hoy será mi último partido. Creo que éste ha sido mi último baile y merecía que fuese así”, confesó el de Narón.

Diego Rivas fue la solución de urgencia de los de O Carballiño para solucionar el problema originado en la portería verde, después de que el Deportivo decidiese ejecutar la “cláusula del miedo” que impusieron en el contrato de Pablo Brea, cedido el pasado verano al Arenteiro y titular en las últimas jornadas por las lesiones de los otros dos porteros, Diego García y Manu Figueroa.

Por todo esto Diego Rivas tuvo la oportunidad de poner un broche de oro en su carrera en un escenario como Riazor y ante un rival del que el naronés se declaró seguidor. “Bendito partido y bendita experiencia. El fútbol es muy caprichoso y tiene estas cosas. El destino me tenía guardado este partido para mí, creo que me lo merecía. He disfrutado mucho durante todo el partido, y rematarlo así ha sido especial”.