El fútbol no perdona. Es un fiel reflejo de la vida: no suele haber segundas oportunidades. Borja Freire, ferrolano de nacimiento y racinguista de corazón, no dudó en aceptar una de esas opciones que solo llaman a tu puerta una vez. Con tan solo un puñado de minutos en Segunda B, el Doxa Katokopias chipriota le ofreció un contrato de tres temporadas. Irrechazable. Un enorme salto a nivel deportivo, cultural y económico para un lateral izquierdo cargado de atrevimiento. “El año pasado ya hubo un contacto indirecto. Y hace unas semanas, al acabar la Liga, hablaron conmigo de nuevo”, reconoce al otro lado del teléfono.
Freire debutó en la categoría de bronce en edad juvenil. Acostumbrado a entrenar con el primer equipo, su desparpajo encandiló pronto a Miguel Ángel Tena. El técnico castellonense, una vez finalizada su etapa en el fútbol base, no dudó en ofrecerle un hueco en la primera plantilla. Fue titular en A Malata ante Cerceda, Fuenlabrada, Castilla y Ponferradina, pero desapareció de los planes de Ricardo tras la llegada del argentino Gonzalo. Un total de 342 minutos, además de 84 en Copa del Rey frente al Murcia.
“Tomé la decisión hace solo unos días. Creo que es lo mejor para mí en este momento”, asevera el joven carrilero. Deja en Ferrol a su familia y amigos. Será duro, reconoce: “Abandonar a la gente que me rodea es complicado, pero tengo que aprovechar esta oportunidad que me brinda el fútbol. Espero adaptarme rápido”.
Dentro de poco comenzará su aventura en el Doxa Katokopias, un club con un 61% de extranjeros en plantilla y tres internacionales absolutos. Su coliseo, el Makario Stadium, tiene capacidad para más de 16.000 espectadores. “Por las referencias que tengo, es un club serio. Seguro que lucharemos por hacerlo lo mejor posible en Liga”, repite Borja. Para confirmar sus impresiones, el lateral habló con un excompañero que también militó esta campaña en Chipre: Dani Benítez. “Charlé con Dani para preguntarle cómo es la vida allí y pedirle referencias de la entidad. Me convenció. Tengo muchas ganas de empezar”, confirma.
Lo curioso del asunto es que, a día de hoy, aún no ha existido ningún contacto entre el futbolista y Carlos Mouriz. “Todavía no me llamó, supongo que estará programando la próxima temporada”, declara un Freire que no quiere mojarse acerca del futuro proyecto del Racing: “No conozco muy bien lo que están planteando ni los jugadores con los que contarán, así que no puedo valorarlo. Pero espero que todo salga bien”.
Otro lateral izquierdo español, el sevillano Manu Redondo, militó este curso en el Doxa (cuya traducción al español es “gloria”). Su firma por el cuadro chipriota, eso sí, espera que no suponga un adiós definitivo al Racing a sus escasos 20 años. “Ojalá esto solo sea un hasta luego”, finaliza.
Manu Amor (@ManuAmor1) para muchacalidad.com / #FútbolFerrol