Después de haber recibido cinco goles en el partido de ida el Celta quiso morir matando y llegó a mandar por 3-2 en el marcador pero en un triste final para los celestes con tres expulsados, terminó cediendo un 3-4 final para los canarios. Un resultado con el que los celestes dicen adiós a su participación en la Copa de Campeones tras una gran temporada.
El Celta buscaba una remontada épica y a pesar de que el cuadro olívico se mostró muy activo y pasó por buenos momentos de juego en los minutos iniciales los canarios, como en la ida, volvieron a mostrar su pegada y a los tres minutos de juego ya se adelantaban en el marcador con un tanto del goleador Johan que finalizó de la mejora manera una buena contra de su equipo.
Golpe duro para el Celta, que a pesar de todo no se vino abajo y buscó la meta contraria sobre todo a balón parado desde la esquina en varias ocasiones pero sin consecuencias. Como ocurrió en el partido de ida, los errores propios penalizaron a un Celta que volvió a tropezar en la misma piedra. Una mala salida de pelota propició el 0-2 obra de Marcos Moraga.
Con semejante mazazo encima, el conjunto celeste quedó durante algunos minutos a merced de los canarios que se hicieron con el control del juego. Aun así, el Celta se resistió y trato de sobreponerse. Camparada pudo hacer el 1-2 antes del descanso pero su golpeo al borde del área pequeña se marchó fuera por poco. En el tramo final de esta primera mitad el Celta piso área rival y no permitió más contras de los canarios.
El corazón celeste salió a relucir en la segunda mitad
En el inicio del segundo acto el Celta continuó pisando área rival y Camparada de nuevo estuvo a punto de batir la meta canaria pero su remate de cabeza tocó in extremis en un defensor y salió a córner. No cejó el conjunto de Fredi en su empeño por anotar su primer tanto en la eliminatoria y lo consiguió tras una buena jugada por banda izquierda que toco en el segundo palo Camparada y remachó a la red el recien entrado Diego Rodríguez en el 64 de partido. El tanto dio nuevoso folgos a un Celta que minutos más tarde hacía el tanto del empate. De nuevo por banda izquierda, Álvaro Santos puso la pelota en el corazón del área para que Carril empujara a la red el 2-2 en el 70. El corazón celeste siguía palpitando. Tanto que tres minutos despues el ferrolano Alex González ponía a los suyos por delante al lanzamiento de un libre directo ejecutado de manera magistrál, 3-2. Los canarios respondieron de la misma manera estrellando la pelota en el larguero con un lanzmiento directo de Aitor Sánchez.
A partir de ahí el partido entró en una fase poco afortunada para los celestes en la que vieron como tres de sus futbolistas abandonaban el campo expulsados por doble amarilla. Diego, Álvaro y Joel marchaban camino de los vestuarios en los minutos finales, dejando a su equipo con 8 futbolistas sobre el campo en un triste final para una enorme temporada del Celta. En los minutos de la basura y aprovechando la superioridad numérica Las Palmas le dio la vuelta al resultado con dos goles más obra de Emilio y Amiai para el 3-4 definitivo.