LA CONTRACRÓNICA | Jaén al óleo

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Jorge Deza #FutbolFerrol


Cuando, a las cinco y dos minutos de la tarde de ayer lunes, Albert Luque sacó la bola del Real Jaén como rival del Racing de Ferrol en el play-off de campeones de la Fase de Ascenso a 2ª División B pensé en Emilio Larraz. El técnico verde fue claro y tajante cuando los periodistas de la TVG le preguntaron el domingo pasado qué equipo no quería ver ni en pintura. El jienense. Pues dicho y hecho. Un bote de pintura así de grande, con una brocha del tamaño del quince y una escalera para pintar con comodidad fue lo que le tocó al Racing. Y el aguarrás de regalo. Todo a pedir de boca para un buen cuadro.

Es una eliminatoria de postín. Un choque de históricos que solo se vieron las caras hasta ahora en Segunda (1978/79, 2000/01 y 2001/02). Ambos quieren volver por sus fueros, porque Ferrol y Jaén lo demandan y lo merecen. Son los dos clubs con mejor palmarés de los 18 campeones de este año. Probablemente pocos rivales deseaban pintar la cocina de verde o de blanco. Es una auténtica “Final Two” en Cuarta por subir a Tercera.

De los 17 posibles, el Real Jaén es, quizá, el más complicado que podía tocar en suerte a los nuestros. Equipo fabricado para regresar al bronce español sí o sí y arropado por una afición que llenará de pasión andaluza el moderno campo de La Victoria en el choque de vuelta; el “lagarto” es un contrincante muy sólido y muy potente. Tiene a un artillero de aúpa, el granadino Antonio López, que despachó 31 dianas en el Grupo IX. Muchísimo gol, hasta 99 (en 42 jornadas). Y rebasó el centenar de puntos dejando a sus principales rivales, Linares, Antequera y El Palo, a distancia sideral.

La del Real Jaén fue solvencia a prueba de bomba. No mete miedo pero asombra. En una cosa, por decir algo, fue mejor el Racing: no haber perdido como local hasta la fecha. Los blancos claudicaron ante el Guadix al comienzo de temporada y frente a su “bestia negra”, el Antequera, que les derrotó en las dos vueltas con relativa amplitud. Que nos den la receta los mochanos aunque sea en pintura acrílica.

Más allá de tópicos y anécdotas rezuma condición de favorito el Real Jaén. Su poderío ofensivo, bien repartido pese a la “dictadura” anotadora del amigo Antonio (que los mete a pares, en formato hat-trick y hasta cuatro de una tacada); exigirá muchísimo a los ferrolanos.

Jugar el primer partido en casa ni es bueno ni lo contrario. Marcar en A Malata es absolutamente obligado. Encajar está totalmente prohibido por la normativa europea. El factor campo puede y debe jugar su papel. El ambiente a la orilla del Sardina tiene que ser de solemnidad elevada al cubo. No hay excusas, por mucho que haya oposiciones a concejalías. O se está o no se está. El equipo racinguista ha de morder tanto en el césped como su afición desde el “stand” para viajar luego a Andalucía con renta. Porque es indudable que allá el Real Jaén le va a enseñar a los verdes lo que vale un olivo. Esto es la guerra y aquí no dan chocolatinas. Si hablamos de pintura, o pintas algo o te pintan la cara.

El Racing parece llegar bien pero una fase de ascenso es otro mundo. La eliminatoria es muy difícil. Casi parece más de ascenso a Segunda que a Segunda B. No hay que olvidar que el objetivo de subir es a dos… o a seis partidos. En el lío-lío de un play-off todo es posible. Nadie se marchará a casa pase lo que pase y eso quita estrés y motiva mucho. El domingo hay cartel de grandes. Hay fiesta en A Malata. Y toca vivirla.


@racingferrolsad