A Queixeira, 17:30 h. En ese lugar, en ese momento, el pasado domingo, se disputó el partido entre el At. Arnoia, el equipo con mayor número de tarjetas (111) y número de expulsados (15) del conjunto gallego de la Tercera RFEF, y el Choco.
El partido lo pitó Rodrígo García Gómez, adscrito a la delegación de A Coruña, el árbitro con mayor número de expulsiones del torneo (9) y el cuarto con mayor media de tarjetas mostradas (6,71), casi un punto más de media de 5,81, en los 222 partidos disputados en lo que va de competición.
Como fondo, un At. Arnoia-Polvorín, también pitado por él en la jornada 11 (14/11/2021), que estableció el récord de tarjetas en un partido del grupo (15). A mayores, emparejados con el At. Arnoia-Noia, jornada 9, el de mayor número de expulsados (4). At. Arnoia y García Gómez, como se puede deducir, tienen una temporada en la que, destacan por algo que no les agrada, las medidas disciplinarias.
Reunir a ambos fue provocar la tormenta perfecta y se produjo el diluvio: 7 tarjetas amarillas. 2 dobles amarillas y 4 rojas directas, marcaron un nuevo récord en la nueva 3ª RFEF, que debutaba este año como quinto nivel en el fútbol estatal.
Tras esto, el conjunto del Ribeiro es el más castigado, con 120 tarjetas (91 amarillas, 9 dobles y 11 rojas directas), el que acumula más expulsiones (20) y García Gómez aciende al primer puesto de los árbitros gallegos que utilizan más las tarjetas (62), con 15 expulsados y una media de 7,75 tarjetas mostradas por partido, casi dos puntos por encima de la media (5,87), tras 230 partidos.