En la mañana del domingo, el Municipal de Caranza acogió la quinta jornada de la 1ª División Autonómica Juvenil, entre el Galicia de Caranza ‘B’ y el A.D. Miño. A pesar del mal inicio de partido, los de Caranza consiguieron dominar el encuentro en la segunda mitad.
PRIMERA PARTE
El Miño empezó con fuerza el partido, saliendo con una presión muy alta que impidió que el Galicia de Caranza se encontrara cómodo en el campo, perdiendo muchos balones en la zona de elaboración. Con esta dinámica, llegaron las primeras ocasiones de peligro para los miñenses, poniendo en apuros al portero Chenyang Jiang. La ocasión más clara para los visitantes en estos primeros minutos, llegó tras un centro desde banda izquierda que remataría de un testarazo Alvaro Freire, pero que saldría ligeramente desviado, marchando por la línea de puerta rozando el palo.
Con el transcurso de los minutos, la intensidad frenética inicial empezó a relajarse, dejando un estilo de juego al toque en ambas entidades y sin excesivo peligro ofensivo.
Tras la primera pausa de hidratación, Luciano Barretta del cuadro local, aprovechando un mal control de la defensa visitante, roba el cuero, quedando en un 1vs1 contra el guardameta, que logra alcanzar ‘in extremis’ el lanzamiento. El Caranza, empieza a gozar de buenos minutos tras el mal inicio del encuentro. En el minuto 34, el punta local Gabriel Bouza gozaría de una ocasión desde la media luna que salvó el arquero con una espectacular parada con firma de Iker Casillas en la final del Mundial 2010. Con la igualada en el marcador, llegaríamos al tiempo de refresco.
SEGUNDA PARTE
Tras el reinicio del juego, el cuadro miñés cambió sus dinámicas, practicando en esta segunda mitad un fútbol más vertical para abrir la lata. Por su parte, el Galicia de Caranza, decidió ser fiel a su estilo de juego.
Las ansias de ganar de ambos cuadros, hizo que la intensidad y la tensión en el campo estuviera a flor de piel. En el minuto 13, un mal pase del central, comprometió al cancerbero local, que intentó despejar el balón, que terminó chocando en la espalda del artillero rival haciendo que el esférico estuviera a punto de calarse en la puerta del Galicia. Tan sólo cinco minutos más tarde, es el Miño quien disfruta de una buena ocasión tras una entrada en velocidad de su lateral derecho, que termina barriendo el meta blanquiazul con una fuerte entrada de dudoso penalti que el colegiado decide no pitar.
El partido se estaba convirtiendo en un partido de tenis, las miradas de los espectadores iban de un lado a otro, viendo buenas y rápidas jugadas por parte de los dos planteles. En el minuto 22, la escuadra caranceira casi consigue la primera diana tras un autopase aéreo que finalizaría después Ismael Carballeira colándose en la meta visitante, pero desgraciadamente el árbitro determinó que el jugador se encontraba en posición antirreglamentaria a la hora de efectuar el lanzamiento. No tardaría Ismael Carballeira en re conseguir su tanto en un balón dividido con portero adelantado para efectuar un bonito remate de vaselina.
A pesar de la desventaja en el marcador, el Miño no bajó los brazos y subió líneas para conseguir el tanto del empate. A punto estuvieron de hacerlo en una jugada de córner que acabaría atajando en una parada magistral el guardameta local.
Los últimos minutos del encuentro fueron una exhibición ofensiva por parte de ambos bandos, pero no fue hasta el descuento cuando veríamos el segundo y último gol del partido, de nuevo para el conjunto de Miguel Ángel Varela desde la frontal del área obra de Marcos Pico. Este tanto finiquitaría el partido, quedándose los tres puntos en territorio local.