Lucas Pérez se destacó como un jugador incansable en el empate del Deportivo de La Coruña frente al Málaga en la jornada 8. El capitán gallego recorrió un impresionante total de 11,021 km, consolidándose como el futbolista que más distancia cubrió sobre el césped de Riazor. Una actuación que le valió el reconocimiento como el auténtico «Motor del Dépor».
El empate dejó un sabor agridulce entre los aficionados, ya que el equipo coruñés mostró un gran despliegue físico y control en muchas fases del encuentro, pero no logró concretar una victoria. Sin embargo, el esfuerzo de Lucas no pasó desapercibido, ya que su incansable labor en ataque y defensa fue clave para mantener al equipo en el partido hasta el último minuto.
Lucas fue clave durante el partido, participando activamente en varias oportunidades y siendo protagonista en una jugada polémica de penalti que finalmente fue anulada por el VAR. El de Monelos estuvo muy involucrado en el juego, y aunque no logró marcar, su esfuerzo fue notable, especialmente con un disparo que pasó cerca del poste en los últimos minutos del partido
Con su compromiso incuestionable y liderazgo en el campo, Lucas Pérez sigue siendo una pieza clave para el Deportivo en esta temporada, demostrando que su influencia va mucho más allá de los goles. El equipo se mantiene en la pelea, y este empate es solo un paso más en su camino hacia los objetivos de la temporada.
El Deportivo de La Coruña buscará mejorar su posición en la tabla en la próxima jornada ante el Elche lejos de Riazor, con Lucas y el resto del equipo listos para seguir luchando por los puestos de ascenso.
