El ídolo ruso sigue vinculado al fútbol y no descarta un futuro en el banquillo celeste
Aleksandr Mostovoi, uno de los grandes nombres en la historia del RC Celta de Vigo, sigue siendo un símbolo imborrable para la afición gallega. Este 2024 se cumplen 20 años desde que el «Zar» dejó el club, pero su conexión emocional con Vigo y con el fútbol permanece intacta. Ahora, a sus 56 años, Mostovoi tiene un mensaje claro: se está preparando para regresar al Celta, aunque en un rol completamente distinto.
Preparándose para el reto: el sueño de entrenar al Celta
Lejos de desvincularse del fútbol tras colgar las botas, Mostovoi ha decidido dar un paso más en su carrera al formarse como entrenador. Actualmente, el exjugador ruso está cursando estudios en la academia de la Federación Rusa de Fútbol y ya realizó prácticas con el Dinamo de Moscú. Este giro en su trayectoria refleja su ambición por volver a la élite del deporte como técnico, una meta que no descarta alcanzar en el banquillo del Celta.
«No se debe renunciar a nada, porque en esta vida todo es posible», comentó Mostovoi recientemente en una entrevista. Su conocimiento del español y su experiencia como futbolista de alto nivel lo ubican en una posición interesante, pero el regreso al club vigués no parece inminente.
Dos grandes obstáculos en el camino
Pese a su deseo de volver, hay factores que complican su llegada al Celta como entrenador. Por un lado, su falta de experiencia en la élite como técnico. Aunque ya ha tenido contacto con los banquillos, no ha dirigido en competiciones de máximo nivel, un aspecto que juega en su contra.
Por otro lado, el Celta atraviesa una etapa de estabilidad bajo la dirección de Claudio Giráldez. El técnico de Porriño, que tomó las riendas del equipo en un momento crítico la temporada pasada, logró evitar el descenso y ha consolidado al conjunto gallego en la zona media de la tabla en la actual campaña. Además, Giráldez tiene contrato hasta junio de 2027, lo que asegura la continuidad en el proyecto deportivo.
Un legado imborrable en Vigo
A pesar de las dificultades actuales, el nombre de Mostovoi sigue siendo sinónimo de grandeza para los seguidores celestes. Durante su etapa en el club, entre 1996 y 2004, disputó 286 partidos, anotó 72 goles y repartió 37 asistencias, dejando una huella imborrable en Balaídos. Su carisma y calidad le convirtieron en una figura de culto, especialmente durante los años dorados del equipo en competiciones europeas.
Por ahora, el regreso de Aleksandr Mostovoi al Celta tendrá que esperar. Sin embargo, el «Zar» deja claro que su vínculo con el club y su pasión por el fútbol lo mantienen listo para asumir nuevos desafíos en el futuro.